|
Con el corazón acelerado,
una mano más fría que la otra
y un nerviosismo que me traspasaba la piel,
te deje volar, pero no porque sintiera que tu estabas atrapado
sino porque, yo no quería seguir compartiendo mi jaula contigo.

1 comentarios:

Camilo Lincolao dijo...

Hola!
Estoy un tanto confuso... no sé quien eres.
De todas maneras, gracias por pasar por mi blog.
Eres la cona D:!
De ser así, ¿por que chucha nunca me dijiste que escribías?.
Bueno, trata de responder.
Adiós.~
Camilo.~

Publicar un comentario

Charles Bukowski

No era mi día. Ni mi semana, ni mi mes, ni mi año. Ni mi vida. ¡Maldita sea!